Israel rompió la tregua con Hamas y bombardeó la Franja de Gaza, matando a más de 900 civiles en una semana. La ONU y gobiernos de todo el mundo exigen frenar la ofensiva, liberar rehenes y avanzar hacia una solución pacífica con la creación de dos Estados.
Los recientes bombardeos del ejército de Israel contra la población de La Franja de Gaza, rompen la tregua acordada con Hamas y reactiva el exterminio de un pueblo desarmado que tiene el derecho histórico y cultural a permanecer en su territorio.
En tan solo una semana los soldados israelíes han asesinado a más de 900 ciudadanos inermes, incluyendo niños y ancianos que habían regresado a sus destruidas barriadas. Donald Trump y Benjamin Netanyahu han anunciado el despropósito de sacar a los gazatíes de su tierra y desterrarlos a África y Asia, en una acción reprobable de limpieza étnica. La Organización de las Naciones Unidas, la Liga de las Naciones Árabes y la inmensa mayoría de gobiernos del mundo rechazan este atropello, sin embargo, Trump y Netanyahu continúan adelante con su criminal proceder.
Los demócratas del mundo debemos elevar nuestra condena contra los gobiernos genocidas de Israel y Estados Unidos, pedir que se continúe con la tregua, que Hamas libere a los rehenes y cese cualquier acción terrorista, se desbloquee la ayuda humanitaria y que la comunidad internacional ayude a la reconstrucción de Gaza.
La solución definitiva del conflicto entre Israel y Palestina debe darse sobre la base del acatamiento de las varias resoluciones de la ONU que prevén la existencia de dos Estados y la devolución de los territorios ocupados por Israel después de la guerra de 1967. Estados Unidos que es responsable de financiar y armar al Estado de Israel, ha saboteado permanentemente la concreción de esta solución y por el contrario aúpa el genocidio y la política imperialista de Israel en Oriente Medio, convirtiéndolo en punta de lanza de sus intereses.
