El Gobierno Petro acumula escándalos de corrupción que han golpeado su credibilidad y desatado críticas incluso entre sus antiguos aliados. Desde pactos con congresistas investigados hasta sobornos disfrazados de burocracia, la administración enfrenta acusaciones de traicionar sus propias banderas éticas. El silencio presidencial ha encendido nuevas alertas sobre la deriva política del oficialismo.
Los escándalos del Gobierno Nacional superan las acciones buenas. La decepción rodea las toldas de “petristas decentes”, muchos de ellos pertenecieron a la “lista de los Decentes”, en la elección de 2017, que encabezó Gustavo Petro con la consigna de la lucha contra la corrupción. Pero este flagelo, que Inteligencia Artificial de Google cuantifica en 21 billones de pesos anuales, brota continuamente de entre sus altos funcionarios y aliados en el Gobierno Nacional, sin que el presidente Petro diga “esta boca es mía”; al contrario, mira hacia los costados, busca a quien culpar, especialmente de entre la oposición. Frente a la corrupción en la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, el silencio lo hace cómplice. Presidente Petro: Dime con quién andas…
Es que el presidente Petro armó “una colcha de retazos” en su campaña presidencial; como se lo enrostraron sus contrincantes, utilizó el “todo vale”, aliándose con sectores con méritos suficientes para ser señalados de corruptos, lo que se corroboró en las investigaciones a su hijo, Nicolás Petro, y la de su propia campaña electoral, las cuales parecen estar congeladas. Pero los últimos hechos sobre la captura, por orden de la Corte Suprema de Justicia, de los expresidentes de Senado y Cámara, Iván Name y Andrés Calle, confirman la caracterización corrupta del Gobierno Petro, que incluso ha sobornado al Congreso para la aprobación de sus proyectos, entre ellos el de la Reforma Pensional, que podría ser declarada inconstitucional.
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El presidente Gustavo Petro marca distancia de Iván Name: “Saboteó la reforma pensional, la engavetó siete meses para que no quedara su tiempo de discusión. Se opuso a nuestros proyectos y ahora va a la cárcel, sindicado de robar al Gobierno y al pueblo”, expresó. Los analistas recordaron las trapisondas, componendas y ausencias de Name de la Presidencia del Senado que habrían facilitado la aprobación de la Reforma Pensional, hechos que investiga la Corte Constitucional. Sobre Andrés Calle, expresidente de la Cámara por el Partido Liberal, el Presidente Petro guarda un silencio y soslaya que hizo campaña con él y llamó a votar por Calle en el departamento de Córdoba, junto a Sandra Ortiz, exfuncionaria de Petro, hoy presa, la que “prendió el ventilador”. Es con los dineros del Gobierno Nacional que se soborna al Congreso.
La Presidencia publicó la hoja de vida de Diana Marcela Morales, a quien nombró ministra de Comercio; hay informes en los medios de comunicación que indican que “hubo negociaciones entre el Gobierno nacional y el Partido Liberal, al que Morales está vinculada. De acuerdo con La W, “la designación de Morales responde a un proceso de diálogo entre el presidente Gustavo Petro y un sector del Partido Liberal, que habían presentado varias candidaturas para el cargo” (Infobae, 10 de mayo de 2025). El presidente Petro insiste en comprar los votos, antes con el presupuesto nacional, ahora los “negocia” con puestos burocráticos a los congresistas para la aprobación del proyecto de convocatoria de la Consulta Popular. Es claro que, a cambio del Ministerio, esos Liberales ponen los votos de los senadores para sacar adelante dicha iniciativa.
Presidente Petro, ya el lector sabe quién eres: Si implementa el modelo neoliberal, obedece al capital transnacional, se hunde en el lodo de la corrupción, compra votos con dinero y con puestos. ¡Presidente Petro…Usted es los mismos con las mismas!